19.02.2020 Perfil de Cecilia Bianco: Vivir al límite

Kathryn Bigelow ganó el Oscar a mejor dirección en 2010 por la película The Hurt Locker, titulada en español de Hispanoamérica Vivir al límite. La directora estadounidense fue la primera y única mujer en alzar la estatuilla, logrando además marcar un camino por el que otras han transitado aunque aún no hayan alcanzado el máximo reconocimiento.
Como Bigelow, Cecilia Bianco fue la primera mujer en presidir Mevir. La política no es un territorio donde se vean muchas mujeres en los primeros lugares de visibilización o que tengan injerencia en la sociedad. Sin embargo Bianco también es una de las cuatro mujeres candidatas a la Intendencia Departamental de Lavalleja en la elección que se realizará el 10 de mayo.
La persona
Cecilia María Bianco Ricci nació en Montevideo el 17 de marzo de 1959. «La familia de mi madre, Ricci, es una familia oriunda de Mariscala desde hace muchísimos años, incluso el bisabuelo de mi madre fue uno de los que donó parte de los terrenos para la construcción del pueblo, la familia Cal. De manera que mi vínculo de Mariscala es de toda la vida. Estudié veterinaria y mi madre era una persona que cuya familia estaba vinculada a la actividad agropecuaria, tenían campo y cuando me recibí de veterinaria que ya hace un montón de años, en el año 85 me vine a vivir a Mariscala, a trabajar en mi profesión y ahí empezó, ahí se reforzó un vínculo afectivo muy fuerte que nosotros tenemos con ese pueblo que me recibió con los brazos abiertos y me siento una mariscalense más desde aquella época y como digo siempre tengo el gusto de que la propia gente de mariscala diga ‘vos sos de Mariscala'», comentó Bianco.
La candidata proviene de una familia numerosa. «Somos diez hermanos, vivimos siempre en Montevideo, mi papá que tiene 94 años, 95 va a cumplir el mismo día que yo, el 17 de marzo, era dentista, está jubilado ya hace muchos años y mi mamá nació en lo que entonces se llamaba Estación Corrales en José Pedro Varela, en un establecimiento que mi abuelo arrendaba en la zona y se fue a estudiar de niña el liceo a Montevideo y allí conoció a mi padre y se instalaron allí, fue una familia que tuvo diez hijos», relató.
«Mi mamá falleció hace unos años ya en el 2013 y es una familia grande, como todas las familias grandes muy bochinchera, muy barullenta, de origen italiano por los dos lados así que somos una familia muy unida, para lo que son las familias grandes. Tengo 9 hermanos y 29 sobrinos, 27 de mis hermanos y dos hijos de una querida amiga con la que hicimos toda la carrera juntas que somos muy compañeras y muy unidas, y ellos dos están integrados a mis sobrinos, así que digo que tengo 29. Y ya soy tía abuela de 12 pequeñitos que el más grande va a cumplir 7 años y bebitos hay unos cuantos en la familia, pero menores de seis meses hay cinco bebés», recordó la veterinaria.
Bianco es la única candidata del Frente Amplio que se encuentra radicada en el interior del departamento. «Mi infancia fue una infancia muy feliz, prevengo de una familia que desde el punto de vista económico siempre estuvo bien, mi padre siempre trabajó, mi madre era hija única, se desquitó teniendo diez, ella heredó el campo de sus padres que era en mariscala y nosotros fuimos criados y educados con los valores católicos, mis padres son muy católicos. Después algunos siguieron con esa convicción de fe, otros no, pero todos formados con los valores del cristianismo, que son la esencia del valor del trabajo por el otro, por lo social, eso siempre me pegó muy fuerte, desde mi primera juventud, siempre tuve una inclinación por las cuestiones sociales», mencionó.
La escuela y la formación secundaria transcurrieron en instituciones de gran arraigo religioso. Bianco y su familia vivieron en el barrio que «se llamaba antes La Floresta porque todas las calles de ahí tienen nombres de flores», en la zona de Sayago y el Prado.
Concurrió al colegio católico de las Hermanas Dominicas de la Anunciata e hizo el preparatorio en el Instituto Juan XXIII. En esta última institución el trabajo social marcó fuertemente su personalidad. «Fue mi primera impronta por lo social, hice el preparatorio en el año 75 y 76, en plena dictadura, había algo muy fermental en ese colegio, a pesar de ser un colegio de curas, teníamos allí un centro que era el centro de ex alumnos del colegio donde se hicieron varias actividades clandestinas para lo que era es época de la dictadura. Había un movimiento social importante, siempre vinculado a alguna actividad que por algún lado era una militancia juvenil católica pero con una fuerte impronta en lo social y allí se organizaban recitales, teníamos un diario, alternábamos e intercambiábamos con jóvenes de nuestra edad de otros colegios, incluso de instituciones públicas, me acuerdo en el IAVA por ejemplo teníamos un grupo que iba mucho al centro. Fue una época muy fermental desde el punto de vista de la formación social y política y ya de ahí salí de izquierda del todo», afirmó.
La militancia

La izquierda la marcó desde muy jóvenes en las actividades sociales de estudiantes. Luego al ingresar a la Facultad de Veterinaria también se encontró con un ambiente propicio para la militancia.
«Ingresé a la Facultad de Veterinaria en el año 1977, ahí viví otra experiencia muy rica porque en el año 78 los estudiantes ocupamos la facultad, lo cual mirado con la perspectiva del tiempo porque a veces de repente a los jóvenes de les cuesta darse cuenta de lo que eso significaba, en la época de la dictadura no había libertad, no había libertad de reunirse, no había libertad de expresarse, haber ocupado un centro educativo realmente fue un hito histórico. Había un decano que era Cristi de apellido (Gustavo Cristi), hermano de un general muy consustanciado con la dictadura Esteban Cristi, el hermano de él era el decano de la facultad y quiso imponer un nuevo plan de estudios y allí los más grandes que nosotros decidieron ocupar la facultad y allí estuvimos un par de noches ocupando la facultad en esa oscuridad de la dictadura, lo cual estas cosas no hicieron más que seguir alimentando el espíritu rebelde de cualquier joven. En este caso organizándonos ya en ese momento en un gremio estudiantil que obviamente era clandestino y un poquito más adelante ya militando en el Frente Amplio que también era clandestino en aquella época», recordó.
La militancia de Bianco en la coalición de izquierda comenzó en 1978. «Ese año 78 fue crucial para muchos de nosotros. Yo que venía de una familia conservadora donde en mi casa no se hablaba de política y la dictadura para nosotros en la familia era algo que estaba pasando en otro lugar. No se vivía en mi casa, a pesar de que mis padres eran conservadores en el sentido de la educación pero siempre estuvieron más alineados con los más necesitados, con los más pobres y siempre cuando llegó el tiempo de que nosotros éramos adultos y pudimos conversar estas cosas con ellos nos dimos cuenta que en realidad en ese momento tal vez lo hicieron para protegernos o lo que ellos pensaban que era protegernos de un ambiente social que a veces se ponía muy duro en las cuestiones clandestinas de estudiantes», sostuvo.
«Ese año 78 fue clave, ahí en seguida se formó un comité virtual de estudiantes, un comité del FA de estudiantes de veterinaria, y ahí empezamos una militancia que primero fue gremial como estudiantes y después ya comprometida con el FA», explicó.
La política
Todos los partidos tienen referentes en política, incluso la gente que no milita probablemente tenga alguna preferencia por un político en la historia. Bianco mencionó dos referentes políticos, en primer lugar a uno de los fundadores y líderes indiscutidos del partido: Líber Seregni.
«Para nosotros que vivimos en esa etapa es un referente ideológico y para alguien como yo que además siempre fui independiente dentro del FA, nunca tuve ni una formación doctrinal de ninguno de los partidos que en ese momento conformaron antes el FA, siempre la figura de Seregni como independiente fue para mí una de las referencias más importantes», señaló la candidata.
«Aunque parezca curioso también fue para nosotros un referente en esa época Wilson Ferreira Aldunate. Estaba exiliado, nosotros tenemos muchos compañeros que militaban clandestinamente en el Partido Nacional, jóvenes progresistas que tal vez hoy mirarían con cierto disgusto a algunas de las cosas del PN, entre ellas que no haya una corriente fuertemente wilsonista. Los wilsonistas estudiantes de esa época eran jóvenes muy progresistas ideológicamente y eso también fue lo que nos unió porque Wilson estaba en el exilio mandaba grabaciones y era muy lindo enriquecernos en ese momento con personas que estaban militando clandestinamente como nosotros pero en otro partido, que era un partido tradicional. Algo de eso creo que se ha perdido porque tal vez los partidos tradicionales, sobre todo el PN, ha perdido un poco esos referentes como pudo haber sido Wilson, recientemente se fue otro: Carlos Julio Pereira, que también fue en esa época alguien que estaba muy cercano a las juventudes estudiantiles», expresó.
Sobre Wilson manifestó que «las verdades son verdades y creo que uno debe decirlas, para nosotros en ese momento como estudiantes que estábamos todos juntos, en realidad contra lo que militábamos era contra un gobierno que nos oprimía, que no nos daba libertad. Wilson también fue un entusiasta de animarnos a seguir en esa lucha. Un rebelde».
La veterinaria
En 1985 Bianco egresó de Facultad de Veterinaria e inmediatamente abandonó la capital del país y se radicó en Mariscala.
«Trabajé bastante cuando me recibí y me vine a vivir a Mariscala siempre trabajé en grandes animales, que es lo que me gusta, nunca tuve mucho gusto por las mascotas, pero por una cuestión de vocación. No es que no me gusten los perros, he tenido un montón de perros y buenos perros y perras pero no profesionalmente. Me dediqué a la parte de grandes animales que le decimos nosotros, básicamente a los animales de producción ganadera, que además en la zona de Mariscala es la producción más importante. Trabajé bastante la parte de reproducción en esos primeros años, me había especializado en algunas técnicas como congelación de semen para inseminación, todas tecnologías que ahora están ampliamente superadas pero que en ese momento eran bastante novedosas que se trabajan a nivel de campo, lo hicimos con esta amiga que hacía referencia que sus hijos son mis sobrinos y con otro colega de Mariscala trabajamos bastante en eso, en la parte reproducción y después casi en seguida ingresé al Banco» República.
En 1987 hubo un llamado del BROU para veterinarios. Luego de dos años de ejercer la profesión Bianco empezó a trabajar para la entidad.
«Por primera y única vez se abrió un concurso, porque nunca más entraron veterinarios. Entré ahí, fuimos 16 colegas que entramos en un concurso que también es una satisfacción personal haber ingresado de esa manera al Banco porque fue un concurso donde se presentaron 300 y pico de veterinarios, y además pude elegir el lugar que me quedaba mejor que era Minas, porque ya vivía en Mariscala. Ese fue el transcurrir», relató.
«En la medida que fui agarrando más responsabilidades en el Banco cada vez fui trabajando menos en la profesión liberal aunque seguía haciendo algunas cosas en la zona de Mariscala», agregó.
«Ahí conocí mucho el departamento de Lavalleja porque trabajé muchos años, casi 30 en el Banco República como asesora en la parte de créditos rural y como tasadora de bienes agropecuarios. Eso me dio la posibilidad de conocer muy profundamente el departamento de Lavalleja. Trabajé además en épocas donde el crédito agropecuario llegaba a una parte más amplia de productores a la que puede llegar tal vez hoy y me tocó vivir épocas duras, las épocas de las crisis fuerte del sector agropecuario yo las viví trabajando en el Banco desde una institución que daba créditos. Y eso siempre es muy interesante porque a uno le hace ver a la gente, a las personas más allá de los productores o de los empresarios en momentos tensos de sus vidas y uno aprende mucho también», expresó.
Mevir
La vida de Bianco dio un giro cuando tuvo la oportunidad de ingresar a Mevir, primero como parte de la comisión honoraria, luego como secretaria y por último, ya hasta el 29 de febrero, como la presidenta.
«Me invitaron a participar la comisión honoraria de Mevir a partir de alejamiento de esa comisión de otra colega veterinaria. Me invitó a integrarla, me presentó a quien era entonces el presidente de Mevir que era el arquitecto Francisco Beltrame, el querido Pancho, del que tengo mucho afecto porque fue quien me abrió las puertas en ese momento en Mevir y me alentó y entusiasmó a algo que yo no me había imaginado nunca que iba a terminar trabajando en algo como esto», sostuvo.
«Empecé en forma honoraria, eso fue en el año 2011 en abril y a mediados del año siguiente, en 2012 en julio a Beltrame lo designan Ministro de Vivienda, deja la presidencia de Mevir, se va como Ministro de Vivienda y queda como presidente quien era entonces el secretario de la comisión nacional el Esc. Ariel Díaz. Ariel me invita para que sea la secretaria de la comisión nacional e integre un organismo», narró.
«La comisión nacional se reúne cada 15 días, dos meses por mes y tiene otro organismo más pequeño y más ejecutivo que es la mesa coordinadora que se reúne semanalmente o dos veces por semana, dependiendo de las actividades. Me invita a integrar esa mesa coordinadora. Ya eso exigía un compromiso mayor con Mevir, lo planteé en el Banco República que era mi lugar de trabajo. Los miembros de la comisión nacional los designa el Presidente de la República y por tanto quienes son funcionarios públicos tienen la autorización para cuando tiene reuniones por la comisión no asistir a su lugar de trabajo. Yo lo planteé en el Banco porque eso me implicaba al menos una vez por semana estar en Montevideo, obviamente el Banco me autorizó a hacerlo e implicó mucho trabajo para mí porque yo tenía mucho trabajo en el Banco en esa época y a veces lo tenía que hacer los sábados porque sino no me daba la semana. Me integré a la mesa coordinadora a fines de 2012, en enero de 2013 estaba con un compromiso bastante grande con Mevir de tiempo, de ocupación, de mis intereses y de empezar a conocer una institución que es enorme en muchos sentidos con una gestión bastante difícil, con una cantidad de recursos humanos, con una cantidad de viviendas para gestionar», comentó.
Luego asumió la presidencia de Mevir, convirtiéndose en la primera presidenta que tuvo la organización.
Campaña
Cecilia Bianco, quien también fue edil en la Junta Departamental de Lavalleja, recibió el apoyo de varios grupos en el plenario departamental del FA, además de uno de los pesos pesados del partido en Lavalleja: el dos veces candidato a intendente y presidente de la Mesa Política Departamental, Daniel Ximénez, quien integra su fórmula para mayo.
Además recibió el apoyo de Ernesto Cesar y de Asamblea Uruguay, de su sector de origen Marcha Frenteamplista, de Alianza Progresista y del Nuevo Espacio.