20.07.2020 El arte y la pandemia: dos áreas que colisionaron en 2020
Informe especial
Por Rodrigo Guillén y Karina Núñez
Está claro que los efectos del coronavirus exceden a la salud. La pandemia del SARS-CoV2 impactó fuertemente en la economía de todos los países. Dentro de las áreas más perjudicadas está la de los artistas, que vieron como de la noche a la mañana se bajó el telón y la incertidumbre de volver a actuar se adueñó del año.
Diario La Unión conversó con varios artistas sobre la situación su situación laboral en 2020.
El cantante Martín Piña expresó que la pandemia afectó su actividad «porque debimos ser los primeros en cerrar nuestras puertas y seguramente seremos uno de los últimos en poder reactivar todo».
«La movida tropical y la movida artística da trabajo a mucha gente, no solamente a las caras visibles, sino a todo el equipo que está detrás de escena, de cámaras, que también hoy en día se encuentran sin trabajo. Por suerte de a poco se intenta poder reactivar e intentando se vaya dando todo para poder seguir reactivando la movida», señaló el cantante.
«En nuestro rubro nos afectó al 100% al no poder realizar espectáculos públicos ni privados (fiestas, bailes, cenas show) llevamos más de 100 días sin poder realizar ningún evento», mencionó el DJ Emilio Cáceres, quien a pesar de la baja en su actividad se mostró optimista respecto a los próximos meses. «Siempre trato de verle el lado positivo de las cosas, aún no lo doy por perdido, quiero ser positivo y estar volviendo quizás a un 80% de la actividad para el mes de septiembre», expresó.
Teatro
La pandemia también trastocó la agenda del director de teatro y actor Eduardo Cotto. «Con el grupo De Acá Nomas habíamos comenzado a ensayar una obra «Mi mujer es el Plomero» de Hugo Daniel Marcos y estábamos armando un espectáculo para festejar las 10 temporadas de obras en Minas y todos los lugares que hemos ido. El espectáculo que estábamos por hacer trataba un poco de recopilar todas las obras con escenas de cada una, participación de todos los que han pasado por el grupo y tuvimos que parar todo eso. Ahora hemos iniciado nuevamente a leer la obra que creo que apenas se levante esto la vamos a poner en cartelera», comentó.
«Empezamos el año presencial, cuando surgió esto cortamos, a mediados de mayo comenzamos nuevamente hacerlo presencial y podíamos incluso ir al teatro. Es una obra que son 6 personajes manteníamos distancia y todas las medidas, pero surgieron inconvenientes personales de algunos compañeros más el rebrote de Treinta y Tres y ahí decidimos parar este mes y retomar en agosto de forma presencial», agregó el actor y director.
Mantener la economía en buena forma es uno de los principales desafíos que atraviesan los trabajadores de estos rubros. «El grupo se maneja económicamente por los ingresos que tiene de las funciones, no tiene socios. Es muy difícil mantener un grupo económicamente con eso, han hecho una muy buena administración, los gastos son mínimos y necesarios para la puesta en escena, todo el mundo está colaborando y poniendo cosas de cada uno, dentro de todo es un grupo independiente que está muy bien conceptuado en ese concepto. Las muy buenas gestiones que han hecho de las obras han servido para paliar todo este tiempo», afirmó Cotto.
Influencer
También en el rubro del teatro, otro de los afectados fue el comediante Eduardo Fernández, quien encarna al popular Gaucho Influencer. El actor tenía previsto realizar un show en el teatro Lavalleja en marzo cuando se confirmaron los primeros casos de Covid-19 y se cancelaron todas las actividades que aglomeraran gente.
«Ese día lo viví arriba del Corporación que venía para Minas, traía todo listo la gente consultaba si se suspendía y les decía que no, es más hablaba con gente del teatro y me decían que estaban en reuniones pero que no pasaba nada. Sobre las 22:45 venia cruzando la vía de Ancap me avisan que se suspendieron las funciones. Tenía la opción incluso de haberla hecho el viernes y lo máximo que pasaría que se decretaba en plena función, pero bueno yo elegí el sábado y me jodí, es más hasta la escenografía tengo aquí en Minas», relató.
Fernández detalló cómo logró transformar la situación para seguir trabajando. «Apenas pasó esto era fácil, sentarnos en el sillón de la resignación a llorar y decir y ahora qué hago o seguir haciendo entretenimiento para la gente y que eso llevará a que las marcas y demás empezaran a vender por internet y quisieran hacer publicidad con el personaje. Gracias a dios fue lo que pasó y gracias a eso me ha ayudado a solventarme durante la pandemia sin las obras de teatro. Pienso que hay que reinventarse y sacarle provecho a cada situación, hoy día es una pandemia pero mañana puede ser cualquier otra situación pero no quedarnos con eso amargo de qué haré, hay que hacer, haciendo siempre se llega», afirmó.
Redes sociales
El teletrabajo es una de las opciones que aumentó su modalidad durante este período de tiempo. Las redes sociales normalmente funcionan como difusores del trabajo y actividades, pero en medio de la pandemia se convirtieron en una plataforma que se adaptó a un escenario de un teatro, local bailable o concierto, mediante en el que los artistas pudieron continuar con su actividad.
«Han sido una herramienta fundamental, no solo para esta época de pandemia sino que también antes, ya que las redes sociales hoy son la herramienta más fundamental en todo esto. Todo llega más rápido, hoy se larga un tema, una canción y rápidamente puede estar sonando en Uruguay como en cualquier parte del mundo y eso está más que bueno. Hay que saber manejarlas muy bien, porque son piezas fundamentales para que en este tiempo de pandemia nos podamos mantener vigentes», describió Piña.
Para otros atravesar la virtualidad no resultó tan sencillo. «El actor necesita del contacto con el público, es una cosa que uno se nutre del público y se hace difícil cuando se está solamente frente a una cámara, pasa a ser teatro virtual es como cine, y el cine son repeticiones, tomas y tomas hasta que sale la mejor. No veo una gran solución en el teatro virtual, nunca el actor va a experimentar las mismas intenciones y estados de ánimo frente a la cámara que frente al público», afirmó Cotto.
«Con respecto a las carencias por ejemplo trabajo por la Intendencia con los talleres Municipales en Mariscala, Solís y Minas en estos tres lugares hace unos 5 y 6 años, en Solís estoy desde el 2000 y nosotros no tuvimos ninguna respuesta de Cultura, si bien somos contratados anualmente, nadie nos llamó y nos dijo que no íbamos hacer los talleres este año y sin embargo si llamaron para avisar que íbamos a empezarlos. Ahí vamos siempre a lo mismo la Cultura está quedando relegada, hoy día con la problemática que tenemos de inseguridad, barrios marginados, las periferias y todo eso, tiene que empezar una solución por la educación, la cultura, hemos quedado olvidados y se han visto los reclamos de actores y directores. Si bien han salido son mínimas», cuestionó.
Para Fernández las redes sociales son una herramienta en su trabajo que ya venía utilizando antes de que se desatara la pandemia. «El personaje ya venía en las redes con el plus que veníamos haciendo actuaciones en el Movie e iniciábamos en el interior y eso iba hacer que se acoplara más gente a las redes porque empieza de otra manera a conocer el personaje. Son ocasiones distintas de humor, en las redes le puedo dar lo que es la secuencia en la vida del personaje y en el show puedo hacer un contacto directo con la gente, estar ahí y mostrarle otro tipo de faceta del mismo personaje que puede ser la improvisación, los sketch de humor, darle algo en vivo y en directo. La gente queda muy impactada en un principio cuando ve a la persona que siempre ve en la pantallita y en ese momento lo ve en vivo y en directo, ahí existen unos segundos se shock que no saben qué hacer, ellos están pensando está acá, es real, es algo que yo durante meses lo vi por una pantallita del celular y ahora lo tengo aquí, eso es muy lindo de ver en la cara de la gente», explicó.