08.03.2021 LA HISTORIA CENTENARIA DEL ENTRETENIMIENTO DEL CINE EN LAVALLEJA
Por Karina Núñez
El Cine Doré de Minas fue inaugurado el 19 de noviembre del año 1922 con la película EL PIBE de Charles Chaplin un filme, por supuesto, en blanco y negro y sin sonido. Por esos tiempos el cine era un espectáculo innovador y único por América del Sur y rápidamente fue creciendo en espectadores. Años después fue adquirido por la empresa MAX GLÜCKSMANN, que estaba creciendo muchísimo en Argentina, Chile y Uruguay llegando a tener una importante cantidad de salas en los 3 países.
La pandemia ha tenido un gran impacto sustancial en la industria del cine. En todo el mundo y en diversos grados, los cines y las salas de cine se han cerrado, los festivales se han cancelado o pospuesto, y los estrenos de películas se han trasladado a fechas futuras o se han retrasado indefinidamente.
Cuando los cines y las salas de cine cerraron, la taquilla global cayó en miles de millones de dólares, mientras que el streaming se hizo más popular. El stock de las salas de cine cayó dramáticamente. Muchos éxitos de taquilla originalmente programados para ser lanzados entre marzo y diciembre fueron pospuestos o cancelados en todo el mundo, y las producciones cinematográficas también se detuvieron. Se han pronosticado pérdidas masivas en la industria.
EN EL 2022 NUESTRO CINE CUMPLE 100 AÑOS
Muchos nos preguntamos qué pasa con nuestro cine, ¿cómo ha sido la historia? El próximo año cumple sus 100 años y han pasado muchas generaciones, disfrutando cada película, pero además disfrutando el placer de una salida, ya sea con amigos, pareja, hijos o demás.
Es por ese motivo que decidimos dialogar con el propietario José Luis López, quien mediante una charla muy amena nos fue contando parte de esta gran historia.
José Luis López relató que «este cine el año que viene cumple 100 años, pero por supuesto que no pertenece a mi familia desde aquel entonces. Comenzó cuando el boom del cine, en el año 1922, donde un señor de apellido García, ya que a pesar de que no hay historia escrita para saber y conocer bien esa realidad, solo sé lo que me contaba mi padre. Parece ser que este señor tenía una carpintería en este mismo lugar y como el cine empezó a levantar vuelo decidió poner la carpintería atrás, e instaló un proyector, unas sillas y empezó a funcionar el cine, el que en aquel entonces era cine mudo».
«Evidentemente en los años 20, 30, 40 y 50 el cine fue el esplendor y ahí se fue muy para arriba; hasta que construyó el cine propiamente dicho. Alrededor de los años 40 hubo una compañía que era una empresa que tenía muchas salas de cine en Chile, Argentina, Paraguay y también comenzó a comprar salas en Uruguay y compró esta sala de Minas», comentó el propiestario.
«En ese momento llegó el sonido al cine, ya no solo eran las películas mudas y fue creciendo cada vez más el cinematógrafo. Por el año 1954 aproximadamente mi padre comienza a trabajar en una empresa cinematográfica, ejerciendo como control, por lo que viajaba por todas las salas viendo que lo que decían los propietarios era verdad y Minas le llamó la atención, ya que mi viejo era de Montevideo y le gustó y vio que era una plaza importante, por lo que se asoció con quien era el dueño. En un momento el dueño del cine da un paso al costado y la empresa del cine queda a cargo de papá pero no el edificio, hasta que en el año 1971 puede comprar el edificio y empezaron a venir películas a color, por lo que fue otro plus para que el cine siguiera levantando», referenció López.
CON EL ADVENIMIENTO DE LA TELEVISIÓN A COLOR
Lamentablemente luego con el advenimiento de la televisión a color, empezó a parar y empezaron a surgir los videos clubes que eran con videocasete y sin duda que «la década del 80 marcó la decadencia no solo del Cine Doré, sino de todos los cines del Uruguay y a nivel regional, cayendo el Cine Censa, Trocadero, entre otros».
«En el año 1991 cerró sus puertas y sabemos que hay una generación de jóvenes nacidos en esta década que no conocieron el cine, porque se criaron sin él, y luego reabrió en el año 2000. Comenzaron ahí en esa etapa los microcines, con otras salas», recordó.
VIDEO CLUB
Su padre José Antonio López estuvo hasta que se jubilo y como «somos tres hermanos, pero mis hermanas decidieron otro medio de vida, y yo si bien había elegido ciencias económicas, cuando mi padre se enfermó vi que este era el sustento de la familia y comencé a ayudarlo y terminé quedándome al frente de esto, desde su enfermedad hasta que falleció en el año 97», rememoró López.
Con respecto al video club, dijo que también se dio su nacimiento en el año 1990, con el furor de los videos, «si bien había muchos videos club en Minas cuando abrimos, nos fue bien porque la gente estaba ávida de querer ver películas, porque era un entretenimiento inusual, porque la televisión se veía cuando estaba programada la película, en cambio el video se veía a la hora que le quedaba bien a la familia y se podía dejar y terminar al día siguiente. Sobre el año 2000 la tecnología comenzó a cambiar y pasó al DVD y después salió el Blu Ray que era más efectivo, pero cuando salió este último la tecnología del Internet estaba muy avanzada y no prosperó».
Por lo que en poco tiempo fueron muchos cambios en la tecnología, «hubo una época donde la tecnología no avanzaba mucho y de repente en poco tiempo se disparó y cambió muchísimo».
LA REAPERTURA
Cuando se decide reabrir el cine sucedieron dos cosas, «fallece mi padre y una de mis hermanas que estaba en España vuelve y se radicó en Uruguay, ahí comenzamos a hacer un trabajo de investigación, con encuestas en la sociedad y decidimos abrir las puertas. Un costo económico muy importante y salió al final con dos micro salas, en donde estaba la sala anterior, se logró hacer las dos salas, el hall actual, los baños, las cabinas y quedó con el formato actual, e inclusive después que se abrió la tecnología siguió creciendo y nos tuvimos re aggiornar en butacas, pantalla, sonido, proyectores y por eso no se nos permitió nunca decir tengo un respiro económico, porque permanentemente debimos invertir y renovarnos constantemente».
Soy consciente dijo López que «a todos nos gusta el cine pero sabemos que es un entretenimiento secundario, lo primordial es comer, vestirse, pagar el alquiler, y las salidas quedan a un segundo plano, por eso es difícil muchas veces seguir».
EL CIERRE DEL VIDEO CLUB
Luego llegó el momento de tener que cerrar el videoclub, donde lo más perjudicial fueron las copias y la gente que consume las copias, «por eso siempre sostuve que el gobierno de turno tenía las herramientas porque se podrían haber bloqueado esas páginas donde se bajaban las películas, pero como no lo logró, en el 2008 logró exonerar de IVA todo lo que tenía que ver con películas de video y cine y fue una gran ayuda pero las copias siguieron y la tecnología siguió subiendo y el video club se cerró. Más de 3000 películas están en cajas, otras fueron vendidas, otras se queda la familia, se publicitan en Mercado Libre, y así están».
EL CINE EN TIEMPO DE CORONAVIRUS
Otro tema, en 2020, llega la pandemia y afecta de una gran manera a este rubro, «un antes y un después de la pandemia y el después no sabemos qué sucederá, porque no se ha terminado y sigue hundiéndonos y estamos a unos días de hacer un año que llegó la pandemia a Uruguay y nosotros estamos sin trabajar de manera normal. Porque de los 12 meses estuvimos cerrados 9 meses y los tres meses que abrimos la brecha de endeudamiento se agrandó el doble que si estuviéramos estado cerrado».
Al consultar el por qué no se abre hoy, el empresario argumentó que «primero porque las condiciones no están dadas, para que se abra porque el aforo es inviable, acá son dos micro salas, 100 butacas, 30 por ciento son 30 entradas, y además las distribuidoras no largan los estrenos, no hay cines, porque si abrimos a un 30 por ciento sin estreno, sabemos que nadie va a venir».
Ahora con la vacuna hay una luz de esperanza, «porque casualmente hoy se estrena una película Disney en cines, donde los más valientes en Montevideo y en algunas salas del interior se han atrevido a abrir. Nosotros sabemos que no tenemos fecha de apertura, pero manejamos ciertos parámetros, por lo que no va a ser antes de turismo, pero a partir de turismo habría que ver y poner en la balanza si abrimos o no». Porque la idea, dijo que «es abrir y no cerrar más».
Sin duda agregó López que nadie está preparado para soportar una pandemia, ni «mi viejo lo pensó, ni yo, ni nadie, que esto podría llegar».
El pop es lo único que aún se sigue trabajando, de lunes a sábados desde las 15 y 30 horas, en la puerta del Cine.