15.01.2021 En franco avance institucional, Barrio Olímpico cumple hoy 82 años

Por Leonardo Rodríguez

El Club Atlético Barrio Olímpico, una de las instituciones que mejor trabaja en nuestro medio, está cumpliendo hoy 82 años de vida institucional desde su fundación, allá por 1939, corolario de diversas señales que ya se venían dando camino a la formación de un club, en un entorno y un contexto que se manifestaba como cosecha fiel que ratificaba la vigencia y plenitud de aquella siembra que con su obra efectuó en esa zona de nuestra ciudad el profesor Fernando Estévez, forjador de la Plaza de Deportes, casi una década y media antes del nacimiento del club de la «diagonal roja».

El barrio ya era testigo de justas deportivas. El por entonces Field Oficial, albergaba distintos partidos de la vieja Liga Departamental de Fútbol. La creación de la Escuela N° 7, la llegada del alumbrado eléctrico y la extensión de calle 18 de Julio hasta la Plaza de Deportes (lo que hoy es Wilson Ferreira Aldunate), dotaron a la zona de un entorno diferente.

A la plaza llegó también el básquetbol, con la confección de la cancha de ese deporte. Y Barrio Olímpico comenzaba a dejar de ser una idea, para pasar a ser una realidad, impulsada por los muchachos del barrio, que por entonces defendían a otras instituciones, pues no tenían al club de su barrio para hacerlo oficialmente.  

Desde las charlas en la Plaza de Deportes Nº 1, tomaba fuerza el anhelo de integrarlo y afiliarlo, defenderlo en la Divisional Intermedia y ascender a primera como un sueño lograble.

Al principio, se formaron equipos para jugar amistosos. Con otros barrios de nuestra ciudad o viajando a las canteras de Casabó y Abiega, detrás del Salus. Paralelamente, había gente trabajando para lograr recursos y otros medios que posibilitaran la ansiada afiliación a la Liga.

SU FUNDACIÓN

El 15 de enero de 1939, se reunieron los vecinos del barrio, Esteban Domingo Tolosa, Angel Alberto Santos, Héctor Varela Diano, José Cejas, Ángel Pigola, Telmo Martirena, Roberto C. Núñez, José Tellagorry, Orestes Agriel, Yamandú Varela Diano, Gabriel Martirena, Edison Tolosa, Celestino Ferreira, Clelio Tellagorry, Zoilo Andaite, Ortelio Arezo, Longino M. García, Víctor Gómez Pacheco, Román Martirena, Uberfilio Lorenzo, Gustavo Mercapidez y Vicente C. Herrera.

Preside provisoriamente el acto el Profesor Víctor Gómez Pacheco y convienen en fundar la entidad deportiva que pasan a denominar Club Atlético Barrio Olímpico.

PRIMERA DIRECTIVA

El 2 de febrero de 1939, en régimen de asamblea general y mediante voto, se procede a la conformación de la primera Comisión Directiva del Club, que pasan a integrar de la siguiente manera: Presidente Julio Fornaro, Vicepresidente Juan José Morosoli, Secretario Prof. Víctor Gómez Pacheco, Tesorero Emilio Albistur, Vocales Oscar Menchaca, Zoilo Andaite, Héctor Varela Diano y Celestino Ferreira. Suplentes Atilio Fernández, José Tellagorry, Alberto Santos y Vicente C. Herrera. Comisión Fiscal: Ortelio Arezo y Carmelo Falchetti.

INTERMEDIA Y LA LLEGADA A PRIMERA

Lograda la incorporación a Intermedia, denominada a partir de 1949 «Primera B», Barrio Olímpico buscó el anhelado ascenso que finalmente pudo conseguir en 1954. Su permanencia en Primera División se daría hasta 1986, logrando en ese período un gran ciclo triunfal.

Son muestra de ello, los seis títulos obtenidos en siete temporadas (1956-57-59-60-61 y 62), logros que inauguraron su palmarés en la máxima categoría del fútbol local y que serían repetidos en 1976 y 1981.

A su regreso a primera, en 1991, la institución debió aguardar a 2005 para coronarse, ganando la temporada 2004 del fútbol minuano. Y por último, lo hizo en 2013, con el aliciente de festejar en su propio campo de deportes.

LA SEDE Y LA CANCHA

El 26 de junio de 1960, Barrio Olímpico inauguró su sede social, en un acto donde hubo entrega de medallas a los campeones invictos del torneo local de fútbol, voleibol y tercera división de fútbol. Además, un reconocimiento a Julio Perdomo, goleador del último torneo local y a Jesús N. Pais, goleador de segunda división.

Respecto al campo deportivo, el 10 de agosto de 1987, se firmó la escritura de compra-venta, que coronaba la primera parte del trabajo de la Comisión Pro-Campo de Deportes. En 1992 se delimitó el campo de juego y se colocaron los arcos y en 1995 quedó habilitada para torneos de formativas.

INAUGURACIÓN Y DENOMINACIÓN

El 10 de noviembre de 2013, Barrio Olímpico recibía a Nacional por la vuelta de Semifinales de playoff. El partido se jugó en cancha de los del «Picó-Picó» y ese cotejo marcó la inauguración de ese escenario para partidos de primera división.

Tres años más tarde, la directiva de la institución decidió denominar su campo de deportes con el nombre de la figura más emblemática del club. No sólo por lo obtenido como deportista, es decir los títulos logrados como jugador y técnico, sino también por todo lo que su persona representa para el fútbol minuano. Identificado de forma indeleble con su querido Barrio Olímpico, también erigió su figura en la selección de Lavalleja, a la que defendió durante varios años y acompañó por otros tantos más. La denominación de «Walter Montero» además de ser un acto de estricta justicia, fue un gran homenaje en vida que recibió el querido Pardo y que encontró eco en todas las instituciones del fútbol minuano.

Desde su círculo íntimo nos confirmaban que desde su valoración, la denominación del campo de deportes del club con su nombre, fue el regalo más grande que recibió en su vida.

LA ACTUALIDAD

Tricampeón de Sub 19 y finalista en Sub 16 y Sub 14, Barrio Olímpico goza de un muy buen momento deportivo. Es el gran candidato a ser Campeón del Minuano 2019 de Primera División y producto de la mejor campaña de su historia en el concierto interdepartamental, fue finalista de la Copa Nacional de Clubes Divisional «B» de 2019, lo que le valió el ascenso para la Divisional «A», que finalmente en 2020 no se disputó. Si las condiciones están dadas este año, el «Picó-Picó» es número puesto en la Copa que juegan los mejores.

En lo institucional y específicamente en lo edilicio, tras acogerse al fideicomiso que otorga OFI, se realizan mejoras en su campo de deportes, con edificaciones y mejoras ya proyectadas. Además, se iniciaron gestiones con la intención de poder sumar al club el predio lindero de OSE, lo que permitiría que el «Walter Montero» siga expandiéndose y creciendo. Además de lo ya mencionado, se ha mejorado sustancialmente la sede social del club.

A sus 82 años, el «Picó-Picó» es referencia en nuestro medio, para alegría de su gente y orgullo de sus simpatizantes.